Homilías Dominicales del Ciclo A




miércoles, 15 de junio de 2011

La Trinidad, Homilía del P. Castellani, 1966


Homilía en la Fiesta de la Santísima Trinidad

5 de Junio de 1966

R.P. Dr. Leonardo Castellani, SJ

(Audio: 17' 50")


Volvemos a publicar en nuestro Blog esta sustanciosa homilía que el querido padre Castellani pronunció en la Iglesia de la Visitación. Para oírla, despliegue esta entrada.


La Santísima Trinidad es un misterio absoluto que no podemos comprender, y frente al cual podría llegar incluso a dudarse de la utilidad de tal revelación incomprensible. Pero su fin puede aclararse con tres verbos: Saber, Humillar y Conocer.

Dios quiere que sepamos como Él es para que podamos amarlo mejor. Al mismo tiempo, siendo el intelecto la cosa más excelsa que existe en la creación y más allá de ella, el enfrentarse con este misterio le sirve de freno a la locura de una razón ensoberbecida.
Y, finalmente, en el mayor y más perfecto conocimiento de Dios, podremos conocer mejor al hombre y a las cosas creadas.

Para echar luz sobre el misterio insondable de la Santísima Trinidad y combatir a los herejes que se le oponían, los Santos Padres echaron mano de la filosofía griega, la única que había entonces, la cual, desarmada, limpiada, pulida, transfigurada y completada con los conceptos de persona, naturaleza, procedencia, relación, etc. se ha convertido en el monumento filosófico teológico de la Doctrina Católica que es imperecedero e insuperable.

Por ella sabemos que la Paternidad constituye la persona del Padre que es creador y no engendrado; la Filiación constituye la persona del Hijo que es engendrado y no creado y la Procedencia constituye la persona del Espíritu Santo que es ni creado ni engendrado.

Dios ha tenido la misericordia de revelarnos cosas arcanas de su vida íntima, cuyo reflejo es nuestra vida afectiva. Pidámosle que nos conserve la cordura de la razón, mediante la virtud de la humildad y la fe en la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

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La ilustración: "La Santísima Trinidad", óleo sobre cobre de autor anónimo y que pertenece a una colección privada.

2 comentarios:

  1. Alguien me puede explicar la manera en que el Espíritu Santo "procede" del Padre y del Hijo? Se entiende que el Padre no tiene origen y que Él es el origen del Hijo, que "es" engendrado. Lo que no entiendo es cómo el Espíritu Santo procede de ellos, especialmente dado que proceder es un verbo completamente genérico que sólo indica el origen de algo(uien).

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  2. Como dice el padre Castellani, la relación es la única categoría que puede aplicarse a la Santísima Trinidad.
    Pero se podría intentar "explicar" la procedencia de las personas con la siguiente analogía:

    El padre es el ser, el Hijo es el conocer y el Espíritu es el Amor.

    Ud. existe y conoce ese existir, es decir se conoce a sí mismo y. normalmente, se quiere a sí mismo, quiere a la imagen que tiene de sí mismo.
    Dios Padre Existe y se conoce, es como dice el padre Castellani un Pensamiento pensándose a Sí mismo.
    Éste pensamiento, imagen que el Padre tiene de Sí, es el Hijo, pues en Dios no puede haber accidentes como en nosotros, su conocimiento propio es sustancial no acctidental. De ese modo el Padre engrendra al Hijo por vía del conocimiento, es decir el Hijo procede del Padre.
    Pero así como Ud. quiere a su imagen, el Padre ama a la imagen suya que es el Hijo. Y como el Hijo es una Persona, la Imagen del Padre lo ama también. Ese amor que fluye entre el Padre y el Hijo es también una Persona, por la misma razón que el Hijo lo es. Así procede el Espíritu del Padre y del Hijo.

    Evidentemente esto es una simple analogía que pretende mirar el Misterio a través de la niebla de nuestro entendimiento. Y nada más que eso. Sabremos cómo Es cuando lo podamos ver cara a cara.

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